Seguro que más de una vez te has quedado perpleja con la forma de hacer las cosas que tienen los niños, con la forma de hablar o aprender cosas nuevas. A medida que nos hacemos adultos vamos extrañando cosas que hacíamos en otra etapa de nuestra vida, sobre todo en la infancia por la falta de preocupaciones que teníamos porque todo se arreglaba como por arte de magia. Los niños están siempre en un continuo aprendizaje, pero nosotros los adultos también podemos aprender de ellos cosas que sabíamos de pequeños y con el paso del tiempo hemos ido olvidando.
No tengo miedo y lo intento de nuevo
Aunque a menudo se ven involucrados en pequeños accidentes, los niños no tienen miedo y vuelven a intentarlo de nuevo casi sin pensar. Ojalá los adultos hiciéramos lo mismo y perdiéramos el miedo al fracaso que nos impide volver a empezar
Puedo, ya soy grande
Para los niños no hay imposibles pues se creen grandes para luchar contra las dificultades. Debemos aprender de los niños que para hacer las cosas solo hay que querer y pensando de esta manera nada nos resultará imposible
Los niños solo quieren jugar
Los niños te acompañan todo el día si las actividades que realicen contigo son divertidas. Esta debe ser tu meta en el trabajo, debe ser trabajo claro que si, pero para que sea llevadero te tiene que gustar. Si no estás a gusto con tu trabajo seguro que no rendirás lo suficiente y al final lo abandonarás
Los niños aprovechan el tiempo
Cuando eras niño tenías tiempo para todo, para ir al cole, para jugar, para las actividades extra-escolares, pero ahora que eres adulto te agobias por un poquito más de trabajo. Recupera tu energía y aprende a aprovechar tu tiempo al máximo para que nunca te falte
Los niños se ensucian
A los niños les encanta jugar en la arena, en la tierra y no les importa si tienen puesto el traje de los domingos. Los adultos debemos aprender que la ropa es para disfrutarla y no para vivir pendiente de las manchas y de las arrugas
Los niños se impresionan
Cuando eras pequeño y te ocurría algo nuevo o extraordinario corrías a contárselo a tus padres o a los amigos. A los adultos ya nada nos sorprende, todo nos parece rutinario y no le damos importancia a nada.
Loa niños son curiosos
Los niños se pasan el día preguntando el porqué de las cosas. Los adultos hemos perdido esa capacidad y dejamos que las cosas pasen sin hacernos preguntas.
Comida
Recuerdas cuando te comías todos los dulces o los pasteles del domingo. Ahora de adulto tu única preocupación es la dieta y lo que no puedes comer.
Hacen nuevos amigos
A los niños no les hace falta más que llegar al parque y ya tienen un nuevo amigo. Seguro que tu ya no te acuerdas cuando hiciste un nuevo amigo o si realmente te queda algún amigo de la infancia…